3 h.
2/5
330 m.
6 Km.
4/5
4/5
Tierra
No
Por la AP-2 dirección Lleida -Zaragoza, salimos a la altura de Montblanc y tomamos la N-240. En la rotonda cogemos el desvío Montblanc Nord. Pasado un puente tomamos la primera calle a la derecha, Baluard de Santa Anna y avanzamos con la muralla a nuestra izquierda. Antes del final de la muralla y justo después de una bajada veremos el desvío a la ermita de Sant Joan y GR a nuestra derecha.
El camino se inicia en Montblanc, al final de la calle Baluard de Santa Anna. A mano izquierda encontramos marcas de GR y un indicador. El camino deja el asfalto y pasamos por debajo de un antiguo acueducto que traía el agua de la fuente de la Pasquala hasta la ciudad. Estamos en el camí del Tàrraga, en el GR-171 que nos lleva a Poblet, arteria senderista de la Ruta del Císter.
El recorrido es plano pero pronto vemos un desvío a la izquierda, St. Joan 2,2 Km., y el paso se hace más accidentado con rampas resbaladizas y pequeños repechos de desnivel considerable. Mientras subimos, sin embargo, nos consuelan las vistas a toda la Conca de Barberà.
Ermita y Cingle Blanc de Sant Joan
A lo lejos divisamos el techo de la ermita, junto al mirador y a la izquierda 'El Cingle Blanc de St. Joan' formación rocosa que preside la montaña y por la que discurre una pequeña vía ferrata, La Feixa del Colom.
El camino va perdiendo inclinación, hasta llegar a una pequeña planicie antes de los últimos repechos. Una curiosa campana y unos cipreses nos dan la bienvenida mientras se impone enclavada en la roca la recientemente restaurada ermita de Sant Joan de la Muntanya. La ermita y sus alrededores están bien cuidados y da la impresión de haber dejado muy lejos Montblanc e incluso la comarca. Al entrar a la ermita podemos ver la huella del antiguo templo bien diferenciada en una de sus paredes y también una remodelación algo moderna de la construcción medieval.
Sabemos que la ermita fue reedificada por la princesa Na Elionor d'Urgell en 1414, pero su construcción primigenia es anterior. La segunda planta está casi completamente remodelada y la tercera nos conduce al exterior cerca del mirador donde vale la pena acercarse. A unos metros vemos una indicación para ir a la cova de Nialó, nombre que viene de la princesa Na Elionor quien pasó penitencia en ella. El camino de regreso puede hacerse por una senda alternativa muy bien señalizada o por el mismo camino de la subida.
Montblanc fue fundado por Alfonso I en febrero de 1163, su población fue creciendo hasta que se convierte en una ciudad medieval próspera y se amuralla en el siglo XIV. Montblanc conserva actualmente estas murallas (restauradas) y muchas de sus callejuelas medievales que junto a los bosques de alrededor la hacen particularmente atractiva para el visitante.
Jordi escribió hace 13 años
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Hola!! queremos hacer esta ruta este fin de semana, lo único que me queda es saber algun lugar bueno y sin peligro de grúa para aparcar el coche, asi directamente pongo este punto en el Tom Tom.
Tiene muy buena pinta!! esperemos que el tiempo acompañe!! ;)
saludos!
Gran sitio para visitar.
Localización exacta
Fotos de lugar
Buenas!
Hicimos esta excursión el viernes pasado.
Muy bonita la ermita, vale mucho la pena realizar la caminata y llegar a ese espacio de paz.
Gracias por ayudarnos a descubrir estos lugares!
Saludos!
Aconsejo hacer la ruta, tanto a mi como a mi pareja nos gustó mucho. Yendo a un paso normal de subida estuvimos en poco más de una hora desde que se accede al camino sin asfalto. La vuelta, al ser de bajada se hace mucho más rápido. Si optan a ir por el camino del bosque encontrarán varias bifurcaciones del camino, pero que luego se vuelve a juntar al camino principal, esto la verdad que lo hace divertido. También recomiendo hacer unos 200 mts más, luego de llegar a la cima, y acceder a la cueva donde la princesa hacía sus penitencias.
Amb poc mes d'una hora desde Montblanc arribarem a un mirador esplendit situat a tocar de l'ermita de Sant Joan. El sender esta ben indicat i et dona varies alternatives per arribar-hi, pero cap d'ella es complicada ni esgotadora. L'ermita es oberta, pero cal respectar-la.