4 h.
3/5
200 m.
6 Km.
No
4/5
Río
No
Desde Porto Vecchio tomamos la D-359 siguiendo los indicadores a Alta Rocca hasta Zonza. Salimos del pueblo en dirección a Solenzara por la D-268 pasando por el puerto de Las Agujas de Bavella. A los 20 minutos llegaremos a la altura de Bocca di Larone, después de pasar varias curvas cerradas fáciles de reconocer. Aparcamos en una explanada a la izquierda. Volvemos hacia atrás 200 metros hasta la última curva, en el centro de la cual se inicia un pequeño camino de tierra.
Circulando por la carretera desde Las Agujas de Bavella en dirección a Solenzara, uno intuye, por la gran cantidad de coches aparcados, que algo grande pasa en los alrededores y que vale la pena curiosear para no perdérselo. El río Purcaraccia se extiende por debajo de la carretera y son cientos los bañistas que disfrutan de las cristalinas y frías aguas. Sin embargo vale la pena continuar de frente y aparcar un poco más arriba, en la explanada que conduce a Bocca di Larone, para ir a buscar a pie la parte alta del río, menos concurrida y mucho más espectacular, conocida como el barranco de Purcaraccia.
Los 45 minutos de aproximación son el pequeño precio a pagar para disfrutar de lo lindo en varios toboganes de granito y varios saltos a pozas de un profundo color turquesa. Aunque el cañón de Purcaraccia es un secreto a voces, su encanto está muy lejos de disiparse y es que sin contar la belleza del entorno lo mejor es la diversión que ofrece.
Se lo podéis preguntar a cualquiera de los niños y a más de un adulto, tirándose una y otra vez por los resbalosos y rapidísimos toboganes. Poder disfrutar de eso en un entorno tan privilegiado te hace sentir afortunado y todavía más compartiéndolo con unas risas de complicidad al contemplar las caídas y saltos más extravagantes. Ver a una madre animada por sus hijos a saltar por un tobogán, mientras esta sale despedida hasta el agua es una de las múltiples estampas características de Purcaraccia.
Para llegar a la zona más lúdica del cañón, hay que superar la tentación de unas primeras pozas. El camino continua de frente a la derecha del río y sólo después de cruzarlo y superar una tremenda subida, nos ayudarán raíces y pequeños árboles, llegaremos a la mejor zona de baño ( para los barranquistas el camino sigue todavía más arriba, pero eso ya no lo conocemos...) con sucesivas pozas a las que se puede saltar, unidas por un rápido tobogán, culminadas por una cascada y otro tobogán todavía más divertido con un pequeño salto desequilibrante en el medio.
La verdad es que a una excursión no se le puede pedir más, si visitáis la isla en verano reservad un día para esta ruta imprescindible. El único pero es que debemos ser conscientes de donde nos metemos. En caso de mal tiempo es mejor dejar la ruta para otro día pues el Purcaraccia en crecida no debe ser una excursión muy divertida.
Para hacer el cañón completo muchos guías locales ofrecen esta excursión. Pero a excepción de los rápeles se puede hacer casi todo en bañador, como lo atestiguan las numerosas familias que disfrutan de las primeras pozas. Si eres un barranquista con tu propio equipo lo disfrutarás mucho más a primera hora de la mañana.